La actividad física se asocia con un mejor rendimiento académico, medido por el aumento de promedios y mejores calificaciones en los exámenes estandarizados, de acuerdo con varios estudios realizados por investigadores de la Universidad VU en los Países Bajos.
En conjunto, los estudios mostraron que el incremento de la actividad física para los niños redituaba en un puntaje más alto en la escuela, en particular en materias básicas como matemáticas, inglés y lectura.
Ser más activo implica cualquier deporte, juego y ejercicio que desarrollen los niños dentro o fuera de la escuela, lo que puede mejorar el flujo de sangre al cerebro y más oxígeno a las células implicadas en el aprendizaje y la atención, explica la investigadora de la universidad, Amika Singh.
Además, el ejercicio aumenta los niveles de ciertas hormonas que pueden mejorar el ánimo y combatir el estrés, propiciando un mejor ambiente de aprendizaje.
Los beneficios de una mayor actividad en los niños se extienden más allá del rendimiento académico: pueden comprender de mejor manera las instrucciones y reglas, así como interactuar y establecer relaciones con los demás de manera adecuada.
En el caso de los adultos, este aumento está relacionado con una mayor productividad laboral y bajo índice de ausentismo provocado por enfermedades.
Por lo que los investigadores apoyan la idea de establecer más programas de activación en las escuelas y trabajos, en lugar de sólo una hora al día como está establecido para los menores.
Es necesario fomentar diversas actividades que desafíen a los niños y adolescentes, como el ejercicio, pues les trae beneficios a su salud física y mental. Y tú, ¿Cuánto tiempo destinas cada día a tu acondicionamiento?
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